Ahora, la Biblia habla mucho de este don, pero la palabra no se llama habla, se llama el camino, la senda o el viaje. Es la misma palabra que acabo de traducir como "conversación" del Salmo 50: "Al que ordena bien su conversación, le mostraré la salvación de Dios". La palabra traducida como "conversación", que es el hebreo derech, también se traduce como "el camino".