Tu única responsabilidad es permanecer fiel a tu acto imaginario hasta que lo experimentes en tu mundo exterior. Puedes repetir tu acto imaginario cada noche antes de dormirte. De hecho, puede que desees representar este drama una y otra vez hasta que se sienta normal y natural para ti mientras te duermes. Tu imaginación elaborará los medios para realizar tu sueño mientras tu mente consciente duerme.