"Dios creando el mundo" en seis días, no está describiendo a un ser externo, sentado en un trono lejano, manejando el universo con sus manos. Está hablando del poder creativo ilimitado de la imaginación divina que reside intrínsecamente dentro de ti, en tu propia conciencia. Eres tú, en tu estado más puro y desatado, manifestando tu realidad a través de este poder inherente.