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Capítulo 16 - El Triuno Dios

“Y Dios dijo: Hagamos al hombre a nuestra imagen, según nuestra semejanza.” (Génesis 1:26)

Después de haber descubierto que Dios es nuestra conciencia de ser y que esta reality inmutable e incondicionada (el YO SOY) es el único creador, veamos por qué la Biblia registra a una trinidad como el creador del mundo. En el versículo 26 del primer capítulo de Génesis se dice: "Y Dios dijo: Hagamos al hombre a nuestra imagen." Las iglesias se refieren a esta pluralidad de dioses como Dios el Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo. Lo que se entiende por "Dios el Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo" nunca ellos lo han intentado explicar porque están en la oscuridad con respecto a este misterio.

El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo son tres aspectos o condiciones de la conciencia incondicionada de ser llamado Dios. La conciencia de ser precede a la conciencia de ser algo. Esa conciencia incondicionada que precedió a todos los estados de conciencia es Dios-YO SOY. Los tres aspectos o divisiones condicionados de sí mismos se pueden decir mejor de esta manera:

La actitud receptiva de la mente es ese aspecto que recibe impresiones y, por lo tanto, puede compararse con un útero o una Madre.

-Eso- que hace la impresión es el aspecto masculino o presionante y, por eso, se lo conoce como Padre.

La impresión en el tiempo se convierte en una expresión, cuya expresión es siempre la semejanza y la imagen de la impresión; por eso, se dice que este aspecto objetivado es el Hijo que da testimonio de su Padre-Madre. La comprensión de este misterio de la trinidad permite a quien lo comprende transformar completamente su mundo y crearlo a su gusto.

Aquí hay una aplicación práctica de este misterio. Siéntate en silencio y decide qué es lo que más te gustaría expresar o poseer. Después de que lo hayas decidido, cierra los ojos y desvía tu atención completamente de todo lo que negaría la realización de la cosa deseada; luego asume una actitud mental receptiva y juega el juego de suponer imaginando cómo te sentirías si tú ahora realizaras tu deseo. Comienza a escuchar como si el espacio te estuviera hablando y diciéndote que tú eres ahora -eso- que tú deseas ser.

Esta actitud receptiva es el estado de conciencia que debes asumir antes de poder hacer una impresión. A medida que este estado mental flexible e impresionable es alcanzado, entonces comienzas a impresionarte a tí mismo el hecho de que tú eres -eso- que tú deseabas ser afirmando y sintiendo que tú ahora estás expresando y poseyendo -eso- que tú habías decidido ser y tener. Continúa en esta actitud hasta que la impresión está hecha.

Mientras tú contemplas ser y poseer -eso- que tú has decidido ser y tener, notarás que con cada inhalación de respiración, una emoción alegre recorre todo tu ser... Esta emoción aumenta en intensidad a medida que sientes más y más la alegría de ser -eso- que tú estás reclamando ser. Luego, en una inhalación profunda final, todo tu ser explotará con la alegría de la realización y sabrás por tu sensación que estás impregnado por Dios, el Padre. Tan pronto como la impresión es hecha, abres tus ojos y regresas al mundo al que sólo unos momentos antes te habías cerrado.

En esta actitud receptiva tuya, mientras contemplabas ser -eso- que tú deseabas ser, en realidad estabas realizando el acto espiritual de generación; de modo que ahora estás de regreso de esta meditación silenciosa, un ser embarazado que tiene un hijo o una impresión, hijo que fue concebido inmaculadamente sin la ayuda del hombre.

La duda es la única fuerza capaz de perturbar la semilla o la impresión; para evitar un aborto espontáneo de un niño tan maravilloso, camina en secreto a través del intervalo de tiempo necesario que tendrá la impresión de convertirse en una expresión. No le cuentes a ningún hombre tu romance espiritual. Guarda tu secreto dentro de ti con alegría, confianza y felicidad de que algún día darás a luz al hijo de tu amante al expresar y poseer la naturaleza de tu impresión. Entonces sabrás el misterio de "Dios dijo: Hagamos al hombre a nuestra imagen."

Tú sabrás que la pluralidad de Dioses a los que se hace referencia son los tres aspectos de tu propia conciencia y que tú eres la trinidad, que se reúne en un cónclave espiritual para crear un mundo a imagen y semejanza de -eso- que tú eres consciente de ser.

Actualizado el 16 de may. de 2025